En esta entrada hablaremos de los diferentes alojamientos en nuestra ruta por Japón de 2016. Como siempre, valoraremos nuestra estancia, daremos precios y diremos si los recomendamos o no, con total sinceridad.
En esta ocasión hemos dormido en hoteles, hostels, ryokans, minshukus (casas de huéspedes), apartamento, hotel capsula... vamos que mas variado no podía ser.
En cuanto al sistema de reservas, muchos han sido vía Booking, pero otros lo hicimos directamente en la web del establecimiento. Todos con mucha antelación, como explicamos en el post de "Preparativos".
Además, también se pueden recordar las opiniones que escribimos sobre los alojamientos de nuestro viaje en 2012.
-Hotel New Tohoku (Tokyo):
Teníamos claro que queríamos volver a alojarnos en Ueno, una zona que nos gustó mucho en el primer viaje, por su ambiente y por estar bien comunicado.
Pero para nuestras fechas los hoteles estaban bastante caros, incluyendo el Sardonyx (hotel en el que estuvimos la primera vez).
El único con un precio "aceptable" para nuestro presupuesto era el New Tohoku, y si volviera a Ueno... miraría un apartamento por la zona o pagaría algo más antes que repetir este hotel.
Está situado en un callejón, así que nada de buenas vistas y lo de "New"... sería allá por los años 70. Las habitaciones son pequeñas, como suele pasar en Japón, sobre todo en ciudades como Tokyo, y especialmente pequeño era el baño que, además, no era de los "tecnológicos". Eso sí, toallas, enseres de baño (cepillo dientes, champú etc.) y set de té no le faltaba a la habitación, aunque el secador del pelo no iba muy bien y su cable estaba bastante roñoso.
El personal es amable, hablan bastante inglés y tienen el servicio de envío de maletas.
Hay zona de lavandería (lavadora/secadora que van con monedas), café gratis (pero el desayuno solo es japonés y no lo contratamos), Wi-Fi gratis con buena señal y aire acondicionado/bomba de calor nuevo en la habitación.
Hasta aquí no pinta mal, el problema es cuando empiezas a mirar la limpieza, mas allá de las zonas visibles. Había muchos rincones con polvo, rejillas con mugre... vamos que lo de limpieza a fondo no lo llevaban del todo bien. Además, aunque solo tiene un par de plantas, a parte de la baja, no dispone de ascensor. Eso sí, cuando llegamos la primera vez nos ofrecieron subir la maleta ellos (aunque declinamos) y la segunda vez la maleta había llegado por mensajería y ya nos la encontramos en la habitación.
Nosotros hemos estado en sitios peores, así que ya de perdidos al río, pero no volveríamos ni lo recomendamos a viajeros estándar. Si optáis por él, al menos que sepáis lo que vimos.
Y nos alojamos al inicio y al final del viaje, dos habitaciones diferentes y 7 noches, no fue algo puntual, el estado era algo decadente en ambas habitaciones.
Precio por habitación doble con baño: 8300¥ (las noches del fin de semana son mas caras, esto es la media de las 7 noches).
Conclusión: Precio/noche por el estado del hotel y limpieza no creo que compense. Miraría de conseguir oferta en otro hotel de la zona o apartamento.
-Magome Chaya (Magome):
Este coqueto minshuku (guesthouse) está situado en la pequeña localidad de Magome. Concretamente en la calle histórica que forma parte del camino de Nakasendo.
En la zona hay poco alojamiento y éste era el mas barato cuando lo consulté.
Al llegar te descalzas en la entrada y coges unas zapatillas para andar por la casa, pero las has de dejar a la entrada de la habitación, puesto que el suelo de ésta es de tatami y hay que ir descalzo en ella.
La habitación era espaciosa a pesar de ser la pequeña, con TV, buena señal de Wi-Fi, aire acondicionado/bomba de calor y con un futón muy cómodo.
El futón te lo montas tú pero es fácil, tiene dos niveles de "colchón" (la base digamos) y eso hace que sea blandito. Lo único los cojines, que eran duros, pero conseguí dormir bien con ellos.
El aseo y el ofuro (bañera con ducha) son compartidos (chicos y chicas separados), pero estaban todos impecables.
Para entrar al aseo dejas las zapatillas normales fuera y te pones unas de goma que hay en su entrada. No hay toallas, pero sí un buen secador.
En cambio, en el ofuro sí que hay toallas para ducharse, así como diferentes jabones. Además, puedes llevarte el yukata que te dejan en la habitación para vestirlo tras el baño.
El ofuro no es nuestro concepto de bañera. Es como un onsen, solo que doméstico (sin agua termal). Es decir, te has de duchar bien antes de entrar al agua caliente, que se comparte. En este caso tenían unas tablas de madera cubriendo la bañera para conservar el calor. Algo que había visto en muchos animes y me hizo ilusión.
También tienen zona de lavandería (lavadora/secadora que van con monedas).
La cena y desayuno se pagan aparte y no son baratos, al ser tipo tradicional. Como a Jordi no suele gustarle ese tipo de cena optamos por no pagarlo.
Hay que tener en cuenta que en el pueblo todo cierra pronto, sobre las 17:30, así que mejor traerse la cena y el desayuno comprado de antes.
Los huéspedes que pagan la cena/desayuno han de cruzar a la casa de enfrente, que es donde tienen el comedor. Para los que no, tienen un comedor común muy bonito, de tatami y decorado tradicionalmente. No se puede comer en las habitaciones, hay que bajar a esa salita. También hay una pequeña cocina, por si uno ha de calentar algo, con té y agua caliente gratis.
Se puede reservar vía Booking o a través de su web, pero solo aceptan pago en efectivo. Hablan inglés, son muy amables y la atención es estupenda. ¡Ah! Tienen unas estampitas preciosas, el que haga colección que no dude en pedirlas.
Precio por habitación doble japonesa, pequeña, sin baño: 8100¥ (Con cena y desayuno sale por el doble).
Conclusión: El alojamiento es bonito, una casa de huéspedes de aspecto tradicional, en una ubicación inmejorable. Nos gustó mucho pasar allí esa noche.
-Ise Guest House Kazami (Ise):
Este es el otro alojamiento del viaje que no recomendamos al viajero estándar. Aunque al mochilero mas tradicional creo que no le desagradará por el ambiente.
El local es viejo y con las puertas y ventanas de madera. Puertas que, en algunos casos, no cierran bien, como la de nuestra habitación.
Los aseos son comunes, no separados. Y las duchas están aparte.
La habitación estaba limpia pero muy vieja, menos mal del aire/bomba de calor porque si no menudo frío entraba... Además el futón no fue el mas cómodo de los que hemos probado en Japón.
Se deja los zapatos en la entrada y te pones zapatillas hasta llegar a tu habitación, una vez allí te las quitas para pisar el tatami.
En este hostel no hay toallas, ni enseres varios de baño.
Ahora bien, tienen buena Wi-Fi, un lobby decorado de forma "original", con calefacción y distracciones varias (como mangas), donde varios de los huéspedes, de aspecto mochilero, estaban conversando y pasando el rato relajados.
También hay cocina y zona de lavandería (lavadora/secadora que van con monedas).
Quienes lo llevan son todo jóvenes que dominan bastante bien el inglés.
En resumen, un local muy, muy hippy.
Precio habitación doble sin baño: 6000¥ (pago solo en efectivo).
Conclusión: Lo escogimos porque la zona en si estaba cara para nuestras fechas, y por horarios de trenes necesitábamos algo cerca de la estación. Pero no lo vemos como alojamiento para los viajeros estándar, puesto que carece de ciertas comodidades. Mas bien lo vimos de ambiente mochilero puro y duro o de jóvenes que van a pasar una temporada con calma.
-Yunominesou (Yunomine/Hongu):
Uno de los hotelazos del viaje.
Este ryokan se encuentra a unos 5 minutos a pie, por la carretera, del pueblo de Yunomine, en la zona de Kumano Kodo. Aunque si no te apetece caminarlos, tiene una parada de bus justo delante y solo hay que subir luego una cuesta hasta la puerta del ryokan. Cuando quieres ir del establecimiento al pueblo, en recepción se ofrecen a llevarte en coche.
Al llegar, salieron a recibirnos a la entrada, nos indicaron donde dejar nuestro calzado, nos prepararon las zapatillas y nos subieron las mochilas a la habitación, mientras hacíamos el check-in.
Toda esa atención, mas el impresionante lobby hicieron que Jordi soltara un: ¿Y cuanto dices que nos cuesta este hotel?
En el post de "Preparación de Kumano" explicamos los precios y tipos de alojamiento en la zona y el porque nos decidimos por este.
Nosotros reservamos por Booking, donde pillamos la oferta de "sin cena, ni desayuno", porque eso doblaba el precio y, nuevamente, ese tipo de comida no era del agrado de Jordi. Optamos por llevar nuestros bentos y cenar en la habitación (si se lo comentas, te la calientan).
Si en Booking no da esa opción (a veces se acaba la oferta y te meten la cena), se podría intentar contactar con ellos a través de la web, hay un formulario para rellenar y mandar por email.
Bueno, en la recepción, que hablan bastante inglés, nos informaron de todas las instalaciones que tienen, nos dieron un set de toallas para ir al onsen y después nos hicieron un tour para localizar los diferentes onsens, explicar como funcionan y mostrarnos la pedazo de habitación.
Las zapatillas se dejan en un mini recibidor que tiene la habitación, para no pisar el tatami con ellas. Ahí mismo hay el lavabo, de los que tienen mil botones y se calienta la tapa, (sin ducha, para eso está el onsen).
Después pasamos a la habitación en si, donde estaban los futones, ya preparados, unos yukatas con "chaqueta" incluida, una mesita con galletas y un termo lleno de té (termo que al día siguiente volvía a estar preparado, a nuestra llegada), TV, aire acondicionado/bomba de calor, y el acceso a una "mini terracita" cerrada donde había una mesita para admirar las vistas, una nevera y un tocador.
La Wi-Fi del hotel no llegaba muy bien, pero la chica nos comentó que podíamos conectarnos a la Wi-Fi general de Wakayama y así lo hicimos,
Todo estaba impoluto.
En cuanto a los onsens (ver consejos de como ir a uno), tienen un par de privados y otro par públicos, Todos gratis para los huéspedes.
El privado solo has de ir y ver si está libre, si es así, te cierras y listo. Es bastante austero y no tiene tocador para secarte el pelo después, pero para eso puedes ir al cambiador de los onsens públicos o pedirles un secador para tu habitación.
Los públicos tienen un vestidor impresionante, con tocadores llenos de detalles (secadores, peines y cepillos de dientes desechables, cremas para la cara, etc.), un onsen interior que es donde están las duchas, y un rotenburo u onsen exterior, que es lo que mas me gusta a mi.
Son segregados, y para que se pueda disfrutar de ambos, puesto que son diferentes, a cierta hora de la tarde cierran durante media hora para limpiarlos y cambiarlos de género. Así que hay que prestar atención a las cortinas para saber cual te toca en ese momento. Están abiertos toda la noche, solo cierran de 9:00 a 12:00 para limpiarlos.
Yo fui a las 19:00, hora en que todos estaban cenando, y a las 6:30, hora del desayuno, y pude disfrutar del rotenburo a solas.
Eso sí, si hay gente nada de fotos (lógicamente). Yo aproveché que estaba sola.
Precio por habitación doble japonesa con baño: 11100¥ (sin cena ni desayuno. Pago solo en efectivo)
Conclusiones: Fue el mejor hotel del viaje, y casi diría que el mejor de nuestras dos estancias en Japón. El plus de los onsens y la amabilidad del personal hace que tengamos un recuerdo estupendo.
-Osaka Hana Hostel (Osaka):
En nuestro primer viaje descubrimos la cadena de Hana Hostel y J-hoppers (están asociados), y quedamos contentos, así que no dudamos en reservar el de Osaka, puesto que está céntrico y era una opción "barata" en comparación al resto de hoteles.
Está en la zona de Amerikamura, con ambientillo, restaurantes, a un paso de Dotonbori y bien comunicado.
El personal es muy amable y saben inglés. Si se quiere información sobre lugares a visitar solo hay que consultarles. Además organizan "fiestas" gastronómicas para los huéspedes los fines de semana, donde te enseñan a cocinar okonomiyakis, takoyakis...
La habitación era pequeña, el futón (que te has de montar tu) era cómodo, había secador del pelo, aire acondicionado/bomba de calor, jabones varios en la ducha, pero no toallas (puedes alquilarlas).
La señal Wi-Fi era muy buena.
Al ser hostel no te hacen la habitación durante tu estancia.
También hay comedor y zona de lavandería (lavadora/secadora que van con monedas).
La cadena Hana, junto con su asociado J-hoppers, tienen un cupón donde van sellando las noches que haces en cualquiera de sus alojamientos, y cada X noches te hacen un pequeño descuento y te dan a escoger un regalito. Esos cupones no caducan y son transferibles, con lo cual otros amigos pueden usarlo y acumular descuentos.
Precio por habitación doble japonesa con baño: 8000¥ (varía según fechas y fin de semana, esa es la media de las noches que estuvimos)
Conclusión: Los Hana siguen siendo una buena opción para alojarse en zonas céntricas y evitar pagar un dineral, sobre todo en temporadas altas. A pesar de ser hostels, están muy bien para el viajero estándar y la atención es muy buena.
-Apartamento zona Nijo (Kyoto):
En Kyoto se nos pusieron los precios por las nubes y optamos por buscar un apartamento.
Escogimos uno en la zona de Nijo que tenía buena puntuación, buen precio y no muy lejos de la estación de tren JR Nijo, con lo cual el JR Pass nos sería útil.
Aunque no vimos al anfitrión, su rapidez en responder a cada consulta nos dio mucha tranquilidad, y la verdad es que todo salió a la perfección.
¿Y como se hace el check-in si no ves al anfitrión? Bueno, en Japón se estila mucho el dejar las llaves en el buzón, cerrado con un candado cuya combinación te manda por email justo antes de tu viaje.
También nos pasó las normas y el funcionamiento de las cosas, así como las indicaciones para llegar al apartamento. ¡Seguidlas! Jordi decidió improvisar con Google Maps, y situaba la entrada en un callejón lateral. Por suerte, un anciano nos vio y soltó: "¿Apato?" (apartamento en Japonés) y nos guió al edificio correcto jeje. Por lo visto en ese edificio hay algunos apartamentos de este tipo y los vecinos ya lo saben.
Nuestro apartamento estaba en la planta baja. Al entrar hay el pequeño recibidor donde dejar el calzado, una mini cocina con nevera y microondas, retrete y ducha (están por separado). Después hay la sala que es a su vez dormitorio, con un sofá de suelo, una mesita, una cama doble (muy cómoda) y un armario aunque sin perchas. Esta sala tiene aire acondicionado/bomba de calor.
En la ducha hay toallas, jabones varios y donde la nevera está el secador de pelo.
Tiene un pequeño patio donde está la lavadora (no supimos ver si secaba...), pero sin jabón.
En cuanto a la Wi-Fi, se trata de una pocket Wi-Fi que te puedes llevar durante el día. Eso sí, conectada a una batería portable o no llegará al final de la jornada. Lo malo es que en el apartamento no había buena cobertura, tuvimos que ponerlo cerca de la puerta para poder conectarnos.
Precio por apartamento entero: 6600¥ (fueron 54€ la noche, pero hice la conversión a yens para comparar con el resto de alojamientos).
Conclusión: Editado: Como hemos comentado, en el post de preparativos. Dejamos de recomendar el alquiler de apartamentos enteros a través de Airbnb.
-Oike Hotel (kawaguchiko/Fuji):
Otro de los hotelazos del viaje, y el mas caro.
En este viaje quisimos regresar a la zona del Fuji, pero quedándonos a dormir tranquilamente e ir a algún onsen. Así que, en vez de coger un alojamiento barato y pagar los onsens, optamos por darnos un lujo e ir a un hotel que ya los tuviera, y con vistas al Fuji.
El Oike Hotel tiene unas pocas habitaciones "económicas", que se agotan rápido, así que me agendé el reservarlo 6 meses antes, para asegurarme ese tipo de habitación.
Está en el lago kawaguchiko, pero alejado de la estación (unos 15-20 minutos a pie y tiene parada de bus cerca). A partir de las 14:00 ofrecen un servicio de recogida en la estación y por las mañanas también te acercan a ella.
Al hacer el check-in nos informan de todos los horarios de los onsens, del precio de la cena y desayuno (nuevamente, es caro porque es el tradicional, nosotros optamos por cogerla fuera), etc.
A pesar de ser la habitación económica, era amplia, de cama occidental. Y sin vistas al Fuji, claro.
Tenía de todo: Set de té, baño completo con enseres varios, TV, buen Wi-Fi, aire acondicionado/bomba de calor y una bolsita muy mona con la toalla para el onsen y cepillo de dientes.
En cuanto a los onsens, tienen de 3 tipos.
El onsen privado, que es mas bonito que el de Yunomine, está en una especie de jardín. En verdad son dos, y puedes escoger por la foto cual quieres reservar. Pero estos son de pago (3240¥).
Puedes reservar para una hora que esté disponible y cuando te toca tienes 50 minutos para estar en él. En el cambiador hay un tocador con secador del pelo, cremas, peines... de todo vamos.
Nosotros fuimos por la noche y era precioso con la iluminación.
Los onsens públicos son segregados y de dos tipos: Uno que es interior en la azotea y que tiene vistas al Fuji (impresionante bañarte viéndolo), y otros en la planta baja con rotenburo (zona al aire libre). Todos son gratis para los huéspedes y en el cambiador tienen todos las comodidades (Cepillos desechables, secadores, cremas varias, etc.).
Yo recomiendo ir a los dos tipos. Ver el Fuji es una pasada, pero los rotenburo son preciosos, metidos en un jardín y con varias piscinas cada uno.
Recomiendo especialmente el de la derecha (como por la tarde intercambian la entrada entre hombres y mujeres, fui a ambos, además abren casi 24 h), que tiene una pequeña cascada y el jardín es mucho mas bonito.
La lástima es que en todos había gente así que no pudimos hacer fotos de los públicos, pero se pueden ver en su web.
Precio por habitación doble económica: 14300¥ (sin desayuno ni cena).
Conclusión: Fue otro de los hotelazos de Japón. Aunque pica mas que el de Yunomine y se ha de pagar el onsen privado... aún así, el capricho de ver el Fuji tranquilamente desde el onsen, mereció la pena. Ahora bien, habitación/precio gana el de Yunomine.
-Capsule Inn Shinjuku (Tokyo):
Algo que nos quedó pendiente en nuestro primer viaje fue probar un hotel cápsula.
El problema es que en la mayoría no aceptan mujeres. Suelen ser hoteles de paso para ejecutivos y abrirlos a mujeres requiere tener una zona aparte y suponemos que no son una clientela habitual.
Pero encontré uno que nos cuadraba bien en los planes: El Capsule Inn de Shinjuku.
Regresábamos de Kyoto sin maletas, tras una parada en el Fuji, así que era el momento ideal para hacer una noche en él. Tienen sitio para maletas, pero no está cerrado con llave y es un poco caos. Mejor ir solo con lo justo y necesario.
Reservamos con mucha antelación porque hacen descuentos, en especial a las chicas, así que nos salió bien de precio.
Encontrarlo costó un poco porque el cartel es pequeño y está en un edificio compartido con otros negocios. Vamos, que hay que fijarse en un letrero donde están todos los logos y ver que planta es.
Al entrar hay que descalzarse, dejar el calzado en una taquilla y llevarse la llave. En la recepción, donde hablan inglés, nos explicaron las normas (haciendo hincapié en que Jordi no podía venir a la zona de mujeres) y nos dieron la llave de nuestras taquillas para la ropa y se quedaron con la del calzado. Al salir, le das la de la taquilla y ellos te devuelven la del calzado.
Las cápsulas no nos resultaron tan pequeñas. Para nuestra constitución pudimos movernos bien y estar cómodos, aunque desde luego no es apto para claustrofóbicos. Tienen una pequeña TV, radio y despertador.
Eso sí, no apagan la luz y te cierras con una cortinilla así que, a quien le cuesta dormir, tapones y/o antifaz. (Creo que el propio hotel te los proporciona si lo pides.)
Pero hubo diferencias entre ambas zonas que hicieron que la experiencia no fuera igual de gratificante para los dos.
Vero (zona chicas):
Una zona muy nueva a la que se accede con un código que está prohibido dar a los hombres. En la taquilla, que está en una habitación de la misma planta, cabía la mochila pero si no, hay unas repisas donde guardar mas equipaje. Dentro de la taquilla había un pijama muy chulo de color marrón o rosa (según la chica), toallas y zapatillas (que se dejan fuera de la cápsula, si es en una superior, en el escaloncito).
Me tocó una cápsula superior, así que tenía que trepar, pero estuvo bien, y no me sentí encerrada.
En cuanto a los baños, son muy nuevos. La zona de aseo es amplia, con todo tipo de detalles (secadores, cepillos de dientes y peines desechables, cremas...). Las duchas son individuales y con jabones varios y mas cremas. El retrete tecnológico, que hasta levantaba y bajaba la tapa solo.
¡Vamos, una pasada! Me lo pasé genial y se lo recomiendo a las chicas para una noche, es toda una experiencia.
Jordi (zona chicos):
La zona no se veía tan nueva y las taquillas no estaban en el mismo piso que las cápsulas. Tampoco lo estaban las duchas, separadas de los baños, y para acceder a ellas había que bajar a recepción y pasar delante de todos.
El pijama era de algodón azul y parecía sacado de los hospitales, el aseo solo tenía jabón de las manos y los retretes eran más básicos. Parecía mas bien un lavabo típico de camping.
Vamos que lo de dormir en una cápsula puede ser una experiencia, pero ya podrían darnos a los chicos los lujos que tienen ellas y, sobre todo, no hacernos bajar en pijama a las duchas... ¡Que en el ascensor te cruzas con las chicas!
Como veis, las dos partes no salimos igual de satisfechas ni convencidas. A mi no me importaría, si voy sola, pasar varias noches con tal de ahorrar. Jordi dice que nanai. jeje
Precio cápsula mujeres, con descuento: 2000¥
Precio hombres, con descuento: 2800¥
Y estos son los alojamientos en los que hemos estado en el viaje Japón 2.0.
Nos ha gustado la variedad que hemos experimentado, pero para que engañarnos... los ryokan lo mejor de lo mejor. jeje
Por suerte no ha habido grandes "fracasos", aunque alguno de ellos no esté decente del todo.
Como siempre, esperamos que nuestra opinión sincera sirva para futuros viajeros. Y como no me canso de repetir, en Japón hay hostels que pueden estar mucho mejor que algunos hoteles... Y con baño privado, así que no hay que cerrarse solo al tema hoteles.
Si tenéis alguna duda sobre alguno de los alojamientos, no dudéis en preguntar vía blog o por email.
En esta ocasión hemos dormido en hoteles, hostels, ryokans, minshukus (casas de huéspedes), apartamento, hotel capsula... vamos que mas variado no podía ser.
En cuanto al sistema de reservas, muchos han sido vía Booking, pero otros lo hicimos directamente en la web del establecimiento. Todos con mucha antelación, como explicamos en el post de "Preparativos".
Además, también se pueden recordar las opiniones que escribimos sobre los alojamientos de nuestro viaje en 2012.
-Hotel New Tohoku (Tokyo):
Teníamos claro que queríamos volver a alojarnos en Ueno, una zona que nos gustó mucho en el primer viaje, por su ambiente y por estar bien comunicado.
Pero para nuestras fechas los hoteles estaban bastante caros, incluyendo el Sardonyx (hotel en el que estuvimos la primera vez).
El único con un precio "aceptable" para nuestro presupuesto era el New Tohoku, y si volviera a Ueno... miraría un apartamento por la zona o pagaría algo más antes que repetir este hotel.
Está situado en un callejón, así que nada de buenas vistas y lo de "New"... sería allá por los años 70. Las habitaciones son pequeñas, como suele pasar en Japón, sobre todo en ciudades como Tokyo, y especialmente pequeño era el baño que, además, no era de los "tecnológicos". Eso sí, toallas, enseres de baño (cepillo dientes, champú etc.) y set de té no le faltaba a la habitación, aunque el secador del pelo no iba muy bien y su cable estaba bastante roñoso.
El personal es amable, hablan bastante inglés y tienen el servicio de envío de maletas.
Hay zona de lavandería (lavadora/secadora que van con monedas), café gratis (pero el desayuno solo es japonés y no lo contratamos), Wi-Fi gratis con buena señal y aire acondicionado/bomba de calor nuevo en la habitación.
Hasta aquí no pinta mal, el problema es cuando empiezas a mirar la limpieza, mas allá de las zonas visibles. Había muchos rincones con polvo, rejillas con mugre... vamos que lo de limpieza a fondo no lo llevaban del todo bien. Además, aunque solo tiene un par de plantas, a parte de la baja, no dispone de ascensor. Eso sí, cuando llegamos la primera vez nos ofrecieron subir la maleta ellos (aunque declinamos) y la segunda vez la maleta había llegado por mensajería y ya nos la encontramos en la habitación.
Nosotros hemos estado en sitios peores, así que ya de perdidos al río, pero no volveríamos ni lo recomendamos a viajeros estándar. Si optáis por él, al menos que sepáis lo que vimos.
Y nos alojamos al inicio y al final del viaje, dos habitaciones diferentes y 7 noches, no fue algo puntual, el estado era algo decadente en ambas habitaciones.
Precio por habitación doble con baño: 8300¥ (las noches del fin de semana son mas caras, esto es la media de las 7 noches).
Conclusión: Precio/noche por el estado del hotel y limpieza no creo que compense. Miraría de conseguir oferta en otro hotel de la zona o apartamento.
-Magome Chaya (Magome):
Este coqueto minshuku (guesthouse) está situado en la pequeña localidad de Magome. Concretamente en la calle histórica que forma parte del camino de Nakasendo.
En la zona hay poco alojamiento y éste era el mas barato cuando lo consulté.
Al llegar te descalzas en la entrada y coges unas zapatillas para andar por la casa, pero las has de dejar a la entrada de la habitación, puesto que el suelo de ésta es de tatami y hay que ir descalzo en ella.
La habitación era espaciosa a pesar de ser la pequeña, con TV, buena señal de Wi-Fi, aire acondicionado/bomba de calor y con un futón muy cómodo.
El futón te lo montas tú pero es fácil, tiene dos niveles de "colchón" (la base digamos) y eso hace que sea blandito. Lo único los cojines, que eran duros, pero conseguí dormir bien con ellos.
El aseo y el ofuro (bañera con ducha) son compartidos (chicos y chicas separados), pero estaban todos impecables.
Para entrar al aseo dejas las zapatillas normales fuera y te pones unas de goma que hay en su entrada. No hay toallas, pero sí un buen secador.
En cambio, en el ofuro sí que hay toallas para ducharse, así como diferentes jabones. Además, puedes llevarte el yukata que te dejan en la habitación para vestirlo tras el baño.
El ofuro no es nuestro concepto de bañera. Es como un onsen, solo que doméstico (sin agua termal). Es decir, te has de duchar bien antes de entrar al agua caliente, que se comparte. En este caso tenían unas tablas de madera cubriendo la bañera para conservar el calor. Algo que había visto en muchos animes y me hizo ilusión.
También tienen zona de lavandería (lavadora/secadora que van con monedas).
La cena y desayuno se pagan aparte y no son baratos, al ser tipo tradicional. Como a Jordi no suele gustarle ese tipo de cena optamos por no pagarlo.
Hay que tener en cuenta que en el pueblo todo cierra pronto, sobre las 17:30, así que mejor traerse la cena y el desayuno comprado de antes.
Los huéspedes que pagan la cena/desayuno han de cruzar a la casa de enfrente, que es donde tienen el comedor. Para los que no, tienen un comedor común muy bonito, de tatami y decorado tradicionalmente. No se puede comer en las habitaciones, hay que bajar a esa salita. También hay una pequeña cocina, por si uno ha de calentar algo, con té y agua caliente gratis.
Se puede reservar vía Booking o a través de su web, pero solo aceptan pago en efectivo. Hablan inglés, son muy amables y la atención es estupenda. ¡Ah! Tienen unas estampitas preciosas, el que haga colección que no dude en pedirlas.
Precio por habitación doble japonesa, pequeña, sin baño: 8100¥ (Con cena y desayuno sale por el doble).
Conclusión: El alojamiento es bonito, una casa de huéspedes de aspecto tradicional, en una ubicación inmejorable. Nos gustó mucho pasar allí esa noche.
-Ise Guest House Kazami (Ise):
Este es el otro alojamiento del viaje que no recomendamos al viajero estándar. Aunque al mochilero mas tradicional creo que no le desagradará por el ambiente.
El local es viejo y con las puertas y ventanas de madera. Puertas que, en algunos casos, no cierran bien, como la de nuestra habitación.
Los aseos son comunes, no separados. Y las duchas están aparte.
La habitación estaba limpia pero muy vieja, menos mal del aire/bomba de calor porque si no menudo frío entraba... Además el futón no fue el mas cómodo de los que hemos probado en Japón.
Se deja los zapatos en la entrada y te pones zapatillas hasta llegar a tu habitación, una vez allí te las quitas para pisar el tatami.
En este hostel no hay toallas, ni enseres varios de baño.
Ahora bien, tienen buena Wi-Fi, un lobby decorado de forma "original", con calefacción y distracciones varias (como mangas), donde varios de los huéspedes, de aspecto mochilero, estaban conversando y pasando el rato relajados.
También hay cocina y zona de lavandería (lavadora/secadora que van con monedas).
Quienes lo llevan son todo jóvenes que dominan bastante bien el inglés.
En resumen, un local muy, muy hippy.
Precio habitación doble sin baño: 6000¥ (pago solo en efectivo).
Conclusión: Lo escogimos porque la zona en si estaba cara para nuestras fechas, y por horarios de trenes necesitábamos algo cerca de la estación. Pero no lo vemos como alojamiento para los viajeros estándar, puesto que carece de ciertas comodidades. Mas bien lo vimos de ambiente mochilero puro y duro o de jóvenes que van a pasar una temporada con calma.
-Yunominesou (Yunomine/Hongu):
Uno de los hotelazos del viaje.
Este ryokan se encuentra a unos 5 minutos a pie, por la carretera, del pueblo de Yunomine, en la zona de Kumano Kodo. Aunque si no te apetece caminarlos, tiene una parada de bus justo delante y solo hay que subir luego una cuesta hasta la puerta del ryokan. Cuando quieres ir del establecimiento al pueblo, en recepción se ofrecen a llevarte en coche.
Al llegar, salieron a recibirnos a la entrada, nos indicaron donde dejar nuestro calzado, nos prepararon las zapatillas y nos subieron las mochilas a la habitación, mientras hacíamos el check-in.
Toda esa atención, mas el impresionante lobby hicieron que Jordi soltara un: ¿Y cuanto dices que nos cuesta este hotel?
En el post de "Preparación de Kumano" explicamos los precios y tipos de alojamiento en la zona y el porque nos decidimos por este.
Nosotros reservamos por Booking, donde pillamos la oferta de "sin cena, ni desayuno", porque eso doblaba el precio y, nuevamente, ese tipo de comida no era del agrado de Jordi. Optamos por llevar nuestros bentos y cenar en la habitación (si se lo comentas, te la calientan).
Si en Booking no da esa opción (a veces se acaba la oferta y te meten la cena), se podría intentar contactar con ellos a través de la web, hay un formulario para rellenar y mandar por email.
Bueno, en la recepción, que hablan bastante inglés, nos informaron de todas las instalaciones que tienen, nos dieron un set de toallas para ir al onsen y después nos hicieron un tour para localizar los diferentes onsens, explicar como funcionan y mostrarnos la pedazo de habitación.
Las zapatillas se dejan en un mini recibidor que tiene la habitación, para no pisar el tatami con ellas. Ahí mismo hay el lavabo, de los que tienen mil botones y se calienta la tapa, (sin ducha, para eso está el onsen).
Después pasamos a la habitación en si, donde estaban los futones, ya preparados, unos yukatas con "chaqueta" incluida, una mesita con galletas y un termo lleno de té (termo que al día siguiente volvía a estar preparado, a nuestra llegada), TV, aire acondicionado/bomba de calor, y el acceso a una "mini terracita" cerrada donde había una mesita para admirar las vistas, una nevera y un tocador.
La Wi-Fi del hotel no llegaba muy bien, pero la chica nos comentó que podíamos conectarnos a la Wi-Fi general de Wakayama y así lo hicimos,
Todo estaba impoluto.
En cuanto a los onsens (ver consejos de como ir a uno), tienen un par de privados y otro par públicos, Todos gratis para los huéspedes.
El privado solo has de ir y ver si está libre, si es así, te cierras y listo. Es bastante austero y no tiene tocador para secarte el pelo después, pero para eso puedes ir al cambiador de los onsens públicos o pedirles un secador para tu habitación.
Los públicos tienen un vestidor impresionante, con tocadores llenos de detalles (secadores, peines y cepillos de dientes desechables, cremas para la cara, etc.), un onsen interior que es donde están las duchas, y un rotenburo u onsen exterior, que es lo que mas me gusta a mi.
Son segregados, y para que se pueda disfrutar de ambos, puesto que son diferentes, a cierta hora de la tarde cierran durante media hora para limpiarlos y cambiarlos de género. Así que hay que prestar atención a las cortinas para saber cual te toca en ese momento. Están abiertos toda la noche, solo cierran de 9:00 a 12:00 para limpiarlos.
Yo fui a las 19:00, hora en que todos estaban cenando, y a las 6:30, hora del desayuno, y pude disfrutar del rotenburo a solas.
Eso sí, si hay gente nada de fotos (lógicamente). Yo aproveché que estaba sola.
Precio por habitación doble japonesa con baño: 11100¥ (sin cena ni desayuno. Pago solo en efectivo)
Conclusiones: Fue el mejor hotel del viaje, y casi diría que el mejor de nuestras dos estancias en Japón. El plus de los onsens y la amabilidad del personal hace que tengamos un recuerdo estupendo.
-Osaka Hana Hostel (Osaka):
En nuestro primer viaje descubrimos la cadena de Hana Hostel y J-hoppers (están asociados), y quedamos contentos, así que no dudamos en reservar el de Osaka, puesto que está céntrico y era una opción "barata" en comparación al resto de hoteles.
Está en la zona de Amerikamura, con ambientillo, restaurantes, a un paso de Dotonbori y bien comunicado.
El personal es muy amable y saben inglés. Si se quiere información sobre lugares a visitar solo hay que consultarles. Además organizan "fiestas" gastronómicas para los huéspedes los fines de semana, donde te enseñan a cocinar okonomiyakis, takoyakis...
La habitación era pequeña, el futón (que te has de montar tu) era cómodo, había secador del pelo, aire acondicionado/bomba de calor, jabones varios en la ducha, pero no toallas (puedes alquilarlas).
La señal Wi-Fi era muy buena.
Al ser hostel no te hacen la habitación durante tu estancia.
También hay comedor y zona de lavandería (lavadora/secadora que van con monedas).
La cadena Hana, junto con su asociado J-hoppers, tienen un cupón donde van sellando las noches que haces en cualquiera de sus alojamientos, y cada X noches te hacen un pequeño descuento y te dan a escoger un regalito. Esos cupones no caducan y son transferibles, con lo cual otros amigos pueden usarlo y acumular descuentos.
Precio por habitación doble japonesa con baño: 8000¥ (varía según fechas y fin de semana, esa es la media de las noches que estuvimos)
Conclusión: Los Hana siguen siendo una buena opción para alojarse en zonas céntricas y evitar pagar un dineral, sobre todo en temporadas altas. A pesar de ser hostels, están muy bien para el viajero estándar y la atención es muy buena.
-Apartamento zona Nijo (Kyoto):
En Kyoto se nos pusieron los precios por las nubes y optamos por buscar un apartamento.
Escogimos uno en la zona de Nijo que tenía buena puntuación, buen precio y no muy lejos de la estación de tren JR Nijo, con lo cual el JR Pass nos sería útil.
Aunque no vimos al anfitrión, su rapidez en responder a cada consulta nos dio mucha tranquilidad, y la verdad es que todo salió a la perfección.
¿Y como se hace el check-in si no ves al anfitrión? Bueno, en Japón se estila mucho el dejar las llaves en el buzón, cerrado con un candado cuya combinación te manda por email justo antes de tu viaje.
También nos pasó las normas y el funcionamiento de las cosas, así como las indicaciones para llegar al apartamento. ¡Seguidlas! Jordi decidió improvisar con Google Maps, y situaba la entrada en un callejón lateral. Por suerte, un anciano nos vio y soltó: "¿Apato?" (apartamento en Japonés) y nos guió al edificio correcto jeje. Por lo visto en ese edificio hay algunos apartamentos de este tipo y los vecinos ya lo saben.
Nuestro apartamento estaba en la planta baja. Al entrar hay el pequeño recibidor donde dejar el calzado, una mini cocina con nevera y microondas, retrete y ducha (están por separado). Después hay la sala que es a su vez dormitorio, con un sofá de suelo, una mesita, una cama doble (muy cómoda) y un armario aunque sin perchas. Esta sala tiene aire acondicionado/bomba de calor.
En la ducha hay toallas, jabones varios y donde la nevera está el secador de pelo.
Tiene un pequeño patio donde está la lavadora (no supimos ver si secaba...), pero sin jabón.
En cuanto a la Wi-Fi, se trata de una pocket Wi-Fi que te puedes llevar durante el día. Eso sí, conectada a una batería portable o no llegará al final de la jornada. Lo malo es que en el apartamento no había buena cobertura, tuvimos que ponerlo cerca de la puerta para poder conectarnos.
Precio por apartamento entero: 6600¥ (fueron 54€ la noche, pero hice la conversión a yens para comparar con el resto de alojamientos).
Conclusión: Editado: Como hemos comentado, en el post de preparativos. Dejamos de recomendar el alquiler de apartamentos enteros a través de Airbnb.
-Oike Hotel (kawaguchiko/Fuji):
Otro de los hotelazos del viaje, y el mas caro.
En este viaje quisimos regresar a la zona del Fuji, pero quedándonos a dormir tranquilamente e ir a algún onsen. Así que, en vez de coger un alojamiento barato y pagar los onsens, optamos por darnos un lujo e ir a un hotel que ya los tuviera, y con vistas al Fuji.
El Oike Hotel tiene unas pocas habitaciones "económicas", que se agotan rápido, así que me agendé el reservarlo 6 meses antes, para asegurarme ese tipo de habitación.
Está en el lago kawaguchiko, pero alejado de la estación (unos 15-20 minutos a pie y tiene parada de bus cerca). A partir de las 14:00 ofrecen un servicio de recogida en la estación y por las mañanas también te acercan a ella.
Al hacer el check-in nos informan de todos los horarios de los onsens, del precio de la cena y desayuno (nuevamente, es caro porque es el tradicional, nosotros optamos por cogerla fuera), etc.
A pesar de ser la habitación económica, era amplia, de cama occidental. Y sin vistas al Fuji, claro.
Tenía de todo: Set de té, baño completo con enseres varios, TV, buen Wi-Fi, aire acondicionado/bomba de calor y una bolsita muy mona con la toalla para el onsen y cepillo de dientes.
En cuanto a los onsens, tienen de 3 tipos.
El onsen privado, que es mas bonito que el de Yunomine, está en una especie de jardín. En verdad son dos, y puedes escoger por la foto cual quieres reservar. Pero estos son de pago (3240¥).
Puedes reservar para una hora que esté disponible y cuando te toca tienes 50 minutos para estar en él. En el cambiador hay un tocador con secador del pelo, cremas, peines... de todo vamos.
Nosotros fuimos por la noche y era precioso con la iluminación.
Los onsens públicos son segregados y de dos tipos: Uno que es interior en la azotea y que tiene vistas al Fuji (impresionante bañarte viéndolo), y otros en la planta baja con rotenburo (zona al aire libre). Todos son gratis para los huéspedes y en el cambiador tienen todos las comodidades (Cepillos desechables, secadores, cremas varias, etc.).
Yo recomiendo ir a los dos tipos. Ver el Fuji es una pasada, pero los rotenburo son preciosos, metidos en un jardín y con varias piscinas cada uno.
Recomiendo especialmente el de la derecha (como por la tarde intercambian la entrada entre hombres y mujeres, fui a ambos, además abren casi 24 h), que tiene una pequeña cascada y el jardín es mucho mas bonito.
La lástima es que en todos había gente así que no pudimos hacer fotos de los públicos, pero se pueden ver en su web.
Precio por habitación doble económica: 14300¥ (sin desayuno ni cena).
Conclusión: Fue otro de los hotelazos de Japón. Aunque pica mas que el de Yunomine y se ha de pagar el onsen privado... aún así, el capricho de ver el Fuji tranquilamente desde el onsen, mereció la pena. Ahora bien, habitación/precio gana el de Yunomine.
-Capsule Inn Shinjuku (Tokyo):
Algo que nos quedó pendiente en nuestro primer viaje fue probar un hotel cápsula.
El problema es que en la mayoría no aceptan mujeres. Suelen ser hoteles de paso para ejecutivos y abrirlos a mujeres requiere tener una zona aparte y suponemos que no son una clientela habitual.
Pero encontré uno que nos cuadraba bien en los planes: El Capsule Inn de Shinjuku.
Regresábamos de Kyoto sin maletas, tras una parada en el Fuji, así que era el momento ideal para hacer una noche en él. Tienen sitio para maletas, pero no está cerrado con llave y es un poco caos. Mejor ir solo con lo justo y necesario.
Reservamos con mucha antelación porque hacen descuentos, en especial a las chicas, así que nos salió bien de precio.
Encontrarlo costó un poco porque el cartel es pequeño y está en un edificio compartido con otros negocios. Vamos, que hay que fijarse en un letrero donde están todos los logos y ver que planta es.
Al entrar hay que descalzarse, dejar el calzado en una taquilla y llevarse la llave. En la recepción, donde hablan inglés, nos explicaron las normas (haciendo hincapié en que Jordi no podía venir a la zona de mujeres) y nos dieron la llave de nuestras taquillas para la ropa y se quedaron con la del calzado. Al salir, le das la de la taquilla y ellos te devuelven la del calzado.
Las cápsulas no nos resultaron tan pequeñas. Para nuestra constitución pudimos movernos bien y estar cómodos, aunque desde luego no es apto para claustrofóbicos. Tienen una pequeña TV, radio y despertador.
Eso sí, no apagan la luz y te cierras con una cortinilla así que, a quien le cuesta dormir, tapones y/o antifaz. (Creo que el propio hotel te los proporciona si lo pides.)
Pero hubo diferencias entre ambas zonas que hicieron que la experiencia no fuera igual de gratificante para los dos.
Vero (zona chicas):
Una zona muy nueva a la que se accede con un código que está prohibido dar a los hombres. En la taquilla, que está en una habitación de la misma planta, cabía la mochila pero si no, hay unas repisas donde guardar mas equipaje. Dentro de la taquilla había un pijama muy chulo de color marrón o rosa (según la chica), toallas y zapatillas (que se dejan fuera de la cápsula, si es en una superior, en el escaloncito).
Me tocó una cápsula superior, así que tenía que trepar, pero estuvo bien, y no me sentí encerrada.
En cuanto a los baños, son muy nuevos. La zona de aseo es amplia, con todo tipo de detalles (secadores, cepillos de dientes y peines desechables, cremas...). Las duchas son individuales y con jabones varios y mas cremas. El retrete tecnológico, que hasta levantaba y bajaba la tapa solo.
¡Vamos, una pasada! Me lo pasé genial y se lo recomiendo a las chicas para una noche, es toda una experiencia.
Jordi (zona chicos):
La zona no se veía tan nueva y las taquillas no estaban en el mismo piso que las cápsulas. Tampoco lo estaban las duchas, separadas de los baños, y para acceder a ellas había que bajar a recepción y pasar delante de todos.
El pijama era de algodón azul y parecía sacado de los hospitales, el aseo solo tenía jabón de las manos y los retretes eran más básicos. Parecía mas bien un lavabo típico de camping.
Vamos que lo de dormir en una cápsula puede ser una experiencia, pero ya podrían darnos a los chicos los lujos que tienen ellas y, sobre todo, no hacernos bajar en pijama a las duchas... ¡Que en el ascensor te cruzas con las chicas!
Como veis, las dos partes no salimos igual de satisfechas ni convencidas. A mi no me importaría, si voy sola, pasar varias noches con tal de ahorrar. Jordi dice que nanai. jeje
Precio cápsula mujeres, con descuento: 2000¥
Precio hombres, con descuento: 2800¥
Y estos son los alojamientos en los que hemos estado en el viaje Japón 2.0.
Nos ha gustado la variedad que hemos experimentado, pero para que engañarnos... los ryokan lo mejor de lo mejor. jeje
Por suerte no ha habido grandes "fracasos", aunque alguno de ellos no esté decente del todo.
Como siempre, esperamos que nuestra opinión sincera sirva para futuros viajeros. Y como no me canso de repetir, en Japón hay hostels que pueden estar mucho mejor que algunos hoteles... Y con baño privado, así que no hay que cerrarse solo al tema hoteles.
Si tenéis alguna duda sobre alguno de los alojamientos, no dudéis en preguntar vía blog o por email.
cuando vaya a Japon tengo toda tu información eres una crack y felices fiestas
ResponderEliminarGracias!!! tu avisa y te echo un cable jejeje Tengo, además, una lista de hostels BBB ;)
EliminarFelices fiestas!
Menuda lista de hoteles que os habéis currado en este viaje... eso sí, la de onsens tampoco se queda atrás!! Yo lo dejé pendiente... para otra vez será
ResponderEliminarMi objetivo de este viaje: comer y onsens jajaja
EliminarHas de ponerlo en tu lista para el siguiente ;)
Pues hoteles de todas las características. Bien variados. Nosotros también nos quedamos con las ganas de dormir en un hotel cápsula. PÇor si no volvemos a Japón lo hicimos en Vietnam... y como dices tu, tampoco resultó claustrofóbico.
ResponderEliminarUn abrazo y felices fiestas!
No verdad?? Me lo esperaba mas por lo que había leído, pero no se...estuve cómoda xD
EliminarUn abrazo y que tengáis buenas fiestas!!
Me guardo el post. Ya sabes que me quedé con ganas de quedarme en un cápsula. Para la próxima ! Ahora que han pasado meses, estoy saboreando el viaje mucho mas.
ResponderEliminarUn besico !
Has de intentar volver fuera de verano ;) ciertos lugares y aspectos los disfrutarías mas!!
EliminarUn abrazo!
Nosotros estuvimos en Kyoto en otro de los apartamentos de Yoshi, muy cerca de la estación, y volvería al mismo si vuelvo a Kyoto.
ResponderEliminarQue bueno tener otra opinión de un apartamento de Yoshi! Muchas gracias!
EliminarYo tengo claro donde no voy a dormir si viajo a Japón alguna vez, los hoteles cápsula no son lo mío! Me da angustia solo de pensarlo aunque parece que a vosotros no os dió demasiada sensación de claustrofobia...
ResponderEliminarFeliz Navidad chicos!
Jajaja a nosotros para nada!!
EliminarPero es normal que a otras personas os de ;)
Feliz Navidad!!
Ays que de entradas atrasadas tengo!! he empezado por este de los alojamientos, qué recuerdos!!! te tienen que hacer embajadora de los Hana y no cobrarte nada!! lo de la cápsula toda una experiencia, sobre todo para ti, ya veo que para Jordi no fue tan satisfactoria. Todo el que vaya a Japón este año (si es que queda alguien que no fuese elpasado) debe pasar por aquí y leer tus estupendos consejos. Un besote y felices fiestas!!
ResponderEliminarGracias guapa!! ^_^
EliminarLos Hana molan xDD y el capsule a mime divirtió, sí! ^^ creo que es chulo para probarlo.
Felices Fiestas!
Pues me he quedado prendado del Yunominesou, ese está más que apuntado :D
ResponderEliminarUn fuerte abrazo y buena entrada de año. A ver si nos podemos desvirtualizar en 2017 jeje
Es una pasada de alojamiento!! Japón tiene opciones preciosas para darse lujazo.
EliminarBuena entrada de año!! ^_^
Hola! Una preguntilla... Desde Kyoto se puede llegar a Yunominesou? He intentado buscar los desplazamientos pero no lo encuentro :s
ResponderEliminarEs que en hyperdia no salen los buses.
EliminarHas de mirar como ir hasta una de las ciudades de kumano: shingu,nachi station, kii-katsura o kii.tanabe, por ejemplo y ahí mirar buses a yunomine onsen. (el hotel yunominesou tiene una parada justo antes de llegar shimoyunomine, pero no sale en todos los horarios, fijaros en el bus cuando la anuncien)
La línea lila http://www2.tb-kumano.jp/en/kumano-kodo/pdf/Kumano-Kodo_map12.pdf
Aquí tienes horarios
http://www.tb-kumano.jp/en/transport/bus/#localtimetables
http://www2.tb-kumano.jp/en/transport/pdf/Shingu-to-Hongu-Totsukawa-Gojo-bus.pdf
http://www2.tb-kumano.jp/en/transport/pdf/Tanabe-Hongu-Hosshinmon-oji-bus.pdf
http://www2.tb-kumano.jp/en/transport/pdf/Hongu-Nachi-bus.pdf
En el post de preparación de kumano creo que puse también una web con buscador de rutas de buses de la zona.
Ánimo que es un poco lío esta parte de la preparación en kumano.
Jajajajaja, Vero estuvimos en el mismo "hostel" en Ise, imagínate cuando aparecimos allí con las dos niñas pequeñas.
ResponderEliminarCreo que ellos fliparon más, que nosotros con el sitio, pero la verdad es que el staff se portó super bien con las peques, no paraban de jugar con ellas y regalarles cosas. Incluso las pusieron con ellos a pintar unas piedras que luego vendían...
En fin, en 2012 encontramos pocas opciones de alojamiento para elegir en Ise, pero a pesar de ser un lugar bastante "cutre" no tenemos mal recuerdo.
Saludos
Osti que bueno jajaja
EliminarNosotros es que pasamos algo de frío porel mal aislamiento xD
Pero seguro que con las peques estuvieron geniales. ;)
Pues mira que no me fijé en vuestro alojamiento de Ise....
Un saludo